Por fin llegó el día. Más que una película, el fenómeno ‘Star Wars’ vuelve a las pantallas (y a los juguetes, las marcas, las carpetas…) de la mano de Disney. La intención está clara, resucitar una saga que desde 1999, o incluso antes, presentaba signos de agotamiento.
La respuesta es contundente. J.J. Abrams, como ya hiciera con ‘Star Trek‘, devuelve con ‘El Despertar de la Fuerza’ el sentido de la maravilla que tanto hizo brillar a ‘Star Wars‘ en sus orígenes. El director, hábil artífice del entretenimiento del s.XXI, conoce el material que tiene en manos y el público al que pretende satisfacer. Pero esta afirmación encierra lo que también constituye su gran pega, el inevitable encorsetamiento a su voluntad de agradar al grueso de su público. Cosa del todo comprensible en un producto millonario de semejante envergadura, más aún en una saga acostumbrada a recibir más palos que elogios por parte de su propio ejército de fans.
J.J. Abrams, junto a uno de los responsables de la trilogía original, Lawrence Kasdan, escribe un nuevo capítulo en el que ya no solo importa el «cómo» sino el «qué». Y no podía haberse continuado de forma más solvente y satisfactoria. El guión aúna evidentes paralelismos con ‘Una Nueva Esperanza’ al tiempo que ofrece una reinterpretación de sus personajes y esquemas, expande su propio universo e imprime un sello y personalidad propia.
Resulta digno de reconocimiento la intención de su autor por actualizar la historia y sus roles a los tiempos que corren, al contrario de lo que hiciera Colin Trevorrow con ‘Jurassic World‘ al perpetuar rancios modelos arquetípicos.
En términos que escapan al propio mérito cinematográfico, contemplar a los viejos héroes ahora convertidos en leyenda es puro goce para el espectador. De nuevo Harrison Ford llena la pantalla con su mera presencia y en apenas un par de líneas de diálogo con Carrie Fisher se ventilan todo el impostado romanticismo de las precuelas de George Lucas.
Pero ‘El Despertar de la Fuerza’ no se apoya exclusivamente en ellos. En su condición de película introductoria presenta un más que interesante casting repleto de personajes carismáticos con mucha proyección y química. A destacar un más que excelente villano por parte del no menos prometedor Adam Driver, intérprete que se desvela como la perfecta elección para un personaje que anticipa un gran número de matices.
Como cabría esperar, ‘El Despertar de la Fuerza’ es un filme espectacular, repleto de frenéticas escenas de acción. Evita el empacho injustificado de CGI, abogando por el empleo de técnicas más tradicionales que garantizan una mayor longevidad a la película más allá del ocasional despunte tecnológico. Pero por encima de su espectacularidad e impresionante diseño de producción, con esa impagable base espacial Starkiller como estupendo remedo de La Estrella de la Muerte, destaca el ritmo de la película.
A pesar de sus limitaciones, a nivel visual Abrams se desmarca e impone su propios rasgos de estilo, evitando los cánones rígidos y estáticos de Lucas. De esta forma la historia está dotada de un mayor dinamismo y velocidad sin llegar al agotamiento. Si bien el filme no puede disfrutar de la libertad creativa de otro blockbuster semejante como ‘Mad Max: Furia en la carretera‘, el margen de error permitido es mucho menor; aún así el director se mueve como pez en el agua dentro de las acotaciones marcadas por Disney.
La película está repleta de un sano sentido del humor sin caer en ridículos infantilismos. Pero sobre todo, ‘El Despertar de la Fuerza’ aprovecha su vertiente nostálgica para propiciar momentos emocionantes e intrépidos. Es en estas escenas donde la película crece y se convierte en algo más que en un olvidadizo entretenimiento.
Sin renunciar a su naturaleza de película de historia sencilla, este nuevo Episodio VII resulta una estupenda vuelta de tuerca y la perfecta continuación del universo ‘Star Wars’. Pero como fenómeno de masas es irrepetible. Habrá que cruzar los dedos para que el ajetreado calendario previsto por Disney no acabe en saturación.
Mientras tanto solo queda volver a disfrutar de este regalo para los fans (y no tan fans) con el que nos ha obsequiado J.J. Abrams.
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No es nuevo decir que la saga de Star Wars es de lo mejor en la historia del cine ya lo comentaste y yo también lo voy a decir, Hay que aceptar que es distinta a lo hecho por George Lucas pero JJ Abrahams y el resto del equipo lo hicieron de forma fantástica. Pienso que aún falta que esta historia tome fuerza pero esta nueva etapa parece muy buena. Les cuento que la van a estrenar en la tv (información http://hbomax.tv/movie/TTL607247 ) para no perdérnosla. Las películas de Star Wars son tan buenas que nunca nos cansamos de verlas una y otra vez. Que tengan buen día y que la fuerza los acompañe!
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