Título original: ‘The Texas Chainsaw Massacre’. Año: 1974. Duración: 83 min. País: Estados Unidos. Director: Tobe Hooper. Guión: Tobe Hooper, Kim Henkel. Fotografía: Daniel Pearl. Reparto: Marilyn Burns, Paul A. Partain, Edwin Neal, Jim Siedow, Allen Danziger, Gunnar Hansen. Productora: Bryanston Picture. Género: Terror. Estreno (Estados Unidos): 01/10/1974. Estreno (España): 30/03/1977.
Entre las películas más icónicas del género de terror se encuentra ‘La matanza de Texas’, un filme que fue de los primeros en inaugurar el subgénero slasher, caracterizado por estar protagonizado por una banda de jóvenes que van muriendo uno a uno de forma violenta a manos de un asesino. No son pocas las películas que forman parte de este subgénero que también han logrado ser un referente en la temática como son las sagas de ‘Pesadilla en Elm Street’, ‘La noche de Halloween’, ‘Viernes 13’ o ‘Scream’. Películas que han conseguido que sus asesinos protagonistas sean ya personajes legendarios como Freddy Krueger, Jason Verhooes, Michael Myers o Ghostface.
‘La matanza de Texas’ se basa en la historia de Ed Gein, un hombre culpable de asesinar a dos personas y de robar cuerpos de tumbas para hacer ropa y mobiliario con las pieles de los cadáveres y coleccionar sus huesos. El hecho de vender la película como si se tratara de un hecho real como quieren mostrar los títulos iniciales, supone un eficaz añadido terrorífico a la historia. Impactante, desagradable e incómoda son algunos de los muchos calificativos que pueden utilizarse para definirla, la primera imagen, con un cuerpo en proceso de descomposición colgado en una torre en el cementerio, ya muestra claramente sus intenciones. Un filme en que los primeros 35 minutos sirven a modo preliminar a todo lo que está por venir, la función de la primera media hora es presentar a los cinco jóvenes, sin ahondar demasiado en ellos, y en su encuentro con el loco autoestopista amante de las navajas que recogen con su camioneta y que vuelve a aparecer al final. Es a la llegada a la antigua casa abandonada del abuelo de Sally y Franklin cuando el grado de tensión se incrementa y la sensación de que algo va a ocurrir es cada vez más evidente, un factor que se da cuando los personajes de Kirk y Pam avistan a lo lejos una casa. Es en esa casa donde se encuentra el asesino, un hombre con una máscara hecha de piel al que se le conocería como Leatherface y que pasados los años se acabaría convirtiendo en uno de los psicópatas más famosos del género. Aparece tras una puerta con un martillo con el que golpea a Kirk, una escena que ocurre de manera muy rápida, sin ningún tipo de efecto de sonido, la sola presencia imponente del asesino ya funciona por sí misma. El resto de asesinatos buscan encontrar la angustia del espectador al estar mucho más meditados, sabemos que el asesino está ahí, pero no cuando aparecerá para atacar.
La segunda película de Tobe Hooper, que 8 años después estrenaría ‘Poltersgeit’, otro filme emblemático, profundiza en la locura de un perturbado psicópata que era tan solo uno de los miembros de una familia formada por dementes, la animalización del ser humano llevada al extremo más aterrador y primitivo. El principal factor que convierte en estremecedora a ‘La matanza de Texas’ es que Leatherface no tenga ningún motivo para matar a sus víctimas, no actúa por venganza por algún suceso ocurrido en el pasado, sino por pura satisfacción y placer. El arma y seña identitaria del asesino, una sierra mecánica, es de las más macabras y sanguinarias vistas en el cine que demuestra el elevado grado de horror que quiere transmitir la película. Una crueldad mucho más implícita que explícita si se observa desde el punto de vista actual, donde la violencia extrema con exceso de sangre abunda en el subgénero, pero que es de suponer que en el año que se estrenó, 1974, debió generar un gran impacto y pánico en el público, poco habituado en ver escenas tan bestias como las que se dan en la película, de hecho en algunos países llegó a prohibirse durante bastantes años.
Más allá del asesino protagonista y su intención de despedazar a sus víctimas se encuentra la ambientación, una puesta en escena muy inquietante que describe perfectamente a la familia de chalados. La casa en la que viven se hayan gran cantidad de huesos humanos y de otros animales, gallinas enjauladas y cuerpos putrefactos. La noche y la oscuridad, un tópico en las películas de terror, también es utilizada para generar tensión, que se traduce en la larga e intensa persecución de Leatherface a Sally por el bosque, una escena que anticiparía a la del final, mucho más ágil y a la luz del día, pero no por ello menos terrorífica, que se acabaría convirtiendo en una de las escenas más famosas del filme, dos escenas excepcionales ya que gran parte de la acción en el tramo final ocurre en la casa de Leatherface y sus hermanos.
Cuatro décadas después de su estreno, ‘La matanza de Texas’, a la que le siguieron unas secuelas, precuelas y remakes inferiores, sigue aguantando bien el paso del tiempo hasta llegar a ser considerada una película de culto y toda una referencia en posteriores filmes de la misma temática.
Es una película de culto por méritos propios, icónica. Pero también es cierto que la primera media hora se me hace infumable, y que los personajes son planísimos.
Lo mejor: aún hoy muchas de sus escenas y su ambientación (sobre todo esa casa de los horrores) te ponen la carne de gallina.
Me gustaMe gusta