Título original: ‘Les garçons et Guillaume, à table’. Año: 2013. Duración: 85 min. País: Fracia. Director: Guillaume Gallienne. Guión: Guillaume Gallienne. Música: Marie-Jeanne Serero. Fotografía: Glynn Speeckaert. Reparto: Françoise Fabian, Guillaume Gallienne, Yves Jacques, André Marcon, Diane Kruger, Nanou Garcia, Yvon Back, Pierre Derenne, Catherine Salviat. Productora:  Banque Postale Image 4 / Canal+ / Ciné. Género: Comedia. Fecha de estreno (Dinamarca): 20/11/2013. Fecha de estreno (España): 07/03/2014.

Quince minutos de aplausos en su presentación dentro del Festival de Cannes 2013, ochenta y cinco minutos de metraje, luces y sombras cinematográficas, e incontables pequeños detalles que, sin saber muy bien por qué, quedan atrapados en la retina del espectador para no volver a salir. Con el telón bajado y la seguridad del que ya es experto en ese particular género de la comédie française, Guillaume Galliene se desnuda ante la cámara y ante sí mismo, sin complejos disfrazados ni falsas realidades, en una obra autobiográfica centrada, culminada y con razón de ser en la relación materno filial y en cómo esta ha determinado, irremediablemente, su concepción sobre la vida.

Y es que, acostumbrados a historias marcadas por el patrón de la decepción/admiración entre padres e hijos, Guillaume Galliene experimenta con nuevas formas de narración, reinventa el concepto de versatilidad y no se pone límites en esta buena transición entre teatro y cine. Mérito tiene un gran guión que absorbe la originalidad teatral de la obra y la traslada a la producción cinematográfica de una forma efectiva y con el ritmo necesario para enlazar todos los capítulos de una historia que, posiblemente en manos de otro, parecería dispersa.

En su sencillez encuentra su fórmula para enganchar al espectador. La vida ante la cámara y un Galliene lleno de matices, ya sea detrás o delante del objetivo, jugando continuamente con la dualidad de sus personajes y con el espectador. Y en esta sencillez, es compleja. Miedo a afrontar la realidad, complejas relaciones familiares o búsqueda de la identidad, todo se aúna en esta comedia de la vida, y en la vida de esta comedia.

Avalada por crítica y taquilla, y ejemplo del buen momento que atraviesa el cine francés, ‘Guillaume y los chicos, ¡a la mesa!’ es fresca, inteligente y, ante todo, comedia, consiguiendo el propósito del que no muchas pueden presumir: hacer reír al espectador.

La vida es puro teatro. A Guillaume Galliene le tocó convertirla en comedia de éxito.

Lydia Martínez (@whataboutlydia)