Título original: Epic. País: EE.UU. Año: 2013. Duración: 102 min. Director: Chris Wedge. Guión: Daniel Shere, Tom J. Astle, Matt Ember, James V. Hart (Libro: William Joyce). Música: Danny Elfman. Fotografía: Renato Falcão. Reparto:  Josh Hutcherson, Amanda Seyfried, Colin Farrell, Jason Sudeikis, Aziz Ansari, Beyoncé Knowles, Pitbull. Productora: 20th Century Fox Animation / Blue Sky Studios. Género: Animación / Aventuras. Estreno (EE.UU.): 24/05/2013. Estreno (España): 30/09/2013.

Cuando la joven Mary Katherine vuelve para intentar reanudar la relación con su padre el Profesor Bomba, un científico cuya obsesión es descubrir una diminuta sociedad secreta que habita en el bosque, será transportada sin quererlo a un mundo donde se está librando una batalla entre los Hombres Hoja y los Boggans.

Floja película de animación con base de mensaje ecologista y preservación de la naturaleza.

‘Epic: El mundo secreto’ narra la clásica historia de confrontación entre el bien y el mal sin demasiada inventiva ni originalidad. Ni siquiera el universo mágico está diseñado con imaginación ni ingenio. Les basta con colocar sombreros con forma de flor para vestir a los habitantes del supuesto mundo secreto.

Ni siquiera destaca a nivel visual, con una iluminación excesivamente brillante y una gama de colores bastante escasa a pesar de las amplias posibilidades que ofrece su escenario.

El nivel de detallismo en la animación es muy escaso y se encuentra muy por debajo del acostumbrado a día de hoy. Ni siquiera los momentos de acción proporcionan un espectáculo digno, conformándose con escenas de persecuciones rutinarias y golpes de humor muy básicos.

Los protagonistas no pasan del estereotipo más previsible, siendo el personaje más simpático un perro tuerto con tres patas.

Destaca en la película la banda sonora de Danny Elfman y sus intenciones de sensibilización hacia la naturaleza dirigidas a los más pequeños.

Es posible que los niños de tres a siete años disfruten de la acción y el humor de ‘Epic: El mundo secreto’, pero su recuerdo no pervivirá más de una semana. Los padres sin embargo no dejarán de atender al reloj a la espera de que termine. Olvidable.